Mercedes Molt� est� de buenas

La villana de las telenovelas comienza el 2004 con buenos augurios. Con variasnominaciones a cuestas y la salud recuperada, planea hasta cantar este a�o

Adriana Jarava-Gonz�lez

El 2003 ha sido un a�o intenso para la actriz paname�a Mercedes Molt�, que lleva cerca de 15 a�os radicada en M�xico donde ha sido villana en diversas telenovelas.

Su participaci�n en la telenovela Ni�a amada m�a, versi�n mexicana de la recordada Las Amazonas, fue un rotundo �xito que le vali� nominaciones y elogios de la prensa internacional. Como la ambiciosa Carina se hizo odiar por el p�blico hispano de Estados Unidos, al igual que en M�xico, algo que le hace brotar una sonrisa de satisfacci�n. �Qu� bueno, eso significa que estoy haciendo un buen trabajo�, dice. No hay duda que sus admiradores valoran el que sea una villana tan buena.

Una peque�a batalla

Lo que sin duda dej� huella en su vida este a�o que culmin�, fue el haberse enfrentado a una delicada cirug�a en sus pechos por unos tumores que afortunadamente resultaron benignos. Pero ella ha manejado la situaci�n con entereza y una fuerza sorprendente. En su familia, exist�a un antecedente de una prima que falleci� de c�ncer a los 33 a�os.

Mercedes habla del tema con naturalidad y sin tapujos. �Yo ya sab�a que las ten�a, lo que no sab�a era qu� tan dif�cil iba a ser esa operaci�n y las decisiones que iba a tomar�, se�ala. Pero no hay mal que por bien no venga, porque esta experiencia le ense�� muchas cosas que considera invaluables, adem�s de obtener senos m�s voluptuosos.

�Tengo en mi cabeza que todo fue muy r�pido; creo que no fue tan r�pido, la recuperaci�n fue muy dolorosa... Es horrible que te ba�en, que te ayuden a ir al ba�o. Me desmayaba mucho, sufro de presi�n baja�. Recuerda los momentos malos, as� como los buenos: �Estaba con mi madre, con amigas que me ayudaron y a pesar del miedo y el sufrimiento que uno pasa; la experiencia me ayud� a descubrir que no estoy sola, que hay mucha gente que me quiere y que me lo demostr� constantemente en esos momentos�.

Como todo en esta vida, siempre hubo alg�n malintencionado que pens� que ella s�lo se someti� a una operaci�n de aumento de busto. Al paso Mercedes Molt� valientemente call� la boca publicando las im�genes de su ultrasonido. �Ah� fue donde la gente comenz� a entender que era algo serio�, afirma. Molt� siempre ha sido una artista muy discreta y celosa de su vida �ntima.

Ahora, �a cantar!

Hoy vemos a una Mercedes m�s fuerte y optimista, con una imagen renovada y llena de sue�os y proyectos. En la actualidad, est� haciendo teatro y tambi�n trabaja en la realizaci�n de otro sue�o, grabar un disco. Un proyecto que demostrar� que tiene talentos ocultos que el mundo est� por descubrir.

�Ahora mismo estoy trabajando en eso, estoy buscando todo. Ahora hay tantas combinaciones, estoy buscando el g�nero musical que me quede�, dice, se�alando que de no poderlo hacer �no me meter�a�.

Afirma que le encanta el canto y a trav�s de la m�sica puede transmitir mucho, especialmente �cuando hablas de una buena canci�n, de una buena letra, por eso trabajo en algo de calidad y que me permita transmitir emociones al igual que con la actuaci�n�.

Mercedes reconoce que en el aspecto profesional se siente realizada y solo espera completar su dicha el d�a que encuentre el gal�n con el que pueda protagonizar su propia novela rosa.

�Aqu�l que provoque ese mariposeo maravilloso que solo el amor provoca, ese ser especial con el que todos so�amos para formar un hogar. Yo soy de las que sue�a con un matrimonio para toda la vida�, revela sonriente.

Con Panam� en el coraz�n

Para los que han tenido que emigrar, como es el caso de Mercedes, es dif�cil adaptarse a otro pa�s y costumbres. Recuerda que sus primeros a�os en M�xico fueron dif�ciles porque extra�aba mucho, pero ya est� tan adaptada que hasta su acento y expresiones son mucho m�s mexicanas que paname�as. Sin embargo, se mantiene muy unida a su familia y ra�ces.

Reconoce que su plato favorito es el arroz con pollo y pl�tanos en tentaci�n, que por cierto, asegura que le quedan muy ricos.

Cuando llega a Panam�, cuenta Mercedes, tiene cita, que cumple gustosa, con Athens Pizza y La Inmaculada para comer sundaes y �No me olvides�.

�Yo me como uno, pero mi prima se come tres y Fernando, el hermano, se come cinco... Yo digo �c�mo pueden? Lo m�s que puedo es uno o dos. Es buen�simo, son de los lugares a los que siempre tengo que ir�.

Nuestra conversaci�n llega a su fin, no sin antes se�alar que aunque su vida y su casa est�n en M�xico, siempre lleva a Panam� en el coraz�n