Dinero hiperactivo

Las personas con d�ficit atencional necesitan formular metas a corto, mediano y largo plazo para mejorar sus finanzas personales

Jos� S. Canto A.

Asesor Financiero Personal

Existen muchas personas adultas, que pese a su marcado inter�s por controlar su impulsividad, su constante p�rdida de documentos, su tendencia a postergarlo todo, no lo logran. Es posible que sufran de un desorden neurobiol�gico denominado DA/DH que significa D�ficit de Atenci�n/Desorden de Hiperactividad. Se trata de una condici�n que afecta tanto a ni�os como a adultos y que se caracteriza por problemas de atenci�n, impulsividad e hiperactividad.

Se estima que 2.4% de la poblaci�n adulta de un pa�s podr�a sufrir de este desorden. A�n no hay respuestas definitivas para el DA; sin embargo, las investigaciones parecen demostrar que tiene fuertes bases neurobiol�gicas. Durante a�os se pens� que s�lo los ni�os sufr�an de este desorden. Los adultos con el DA/DH con frecuencia han desarrollado percepciones negativas de s� mismos como �vagos�, �est�pidos� y hasta �locos�.

Manejar las finanzas personales es un reto �nico para una persona con el DA/DH. Las caracter�sticas principales de este desorden son postergaci�n constante de cosas y tareas, desorganizaci�n e impulsividad que llevan a conductas que por sus consecuencias pueden causar estragos en las finanzas personales.

La mayor parte de las personas que tienen problemas con el dinero creen que el no tener suficiente dinero es el problema principal y son incapaces de identificar con precisi�n sus dificultades espec�ficas.

Muchos adultos con DA/DH podr�an mostrar una o m�s de las siguientes dificultades espec�ficas: cheques que rebotan; perder o no pagar estados de cuentas; gastar impulsivamente; comprar cosas por capricho; ser incapaces de ahorrar para cosas costosas, tales como vacaciones, el colegio de los ni�os o el retiro; perder cheques o no mantener un control sobre la chequera; ser desorganizado con los papeles, retrasarse o posponer los pagos de impuestos, olvidar cu�ndo se vencen los pagos del auto o la hipoteca. Perder f�sicamente dinero, sin darse cuenta.

En cuanto a la impulsividad, , no hay que creer que esta siempre es ruidosa. Se puede ver en personas que act�an sin tener en cuenta lo que va a pasar a ra�z de sus acciones. Pero tambi�n puede tratarse de alguien muy callado, aparentemente m�s tranquilo, que toma decisiones impulsivas. En adultos, esto puede verse en decisiones de cambios de trabajo, en el uso del dinero o el manejo del tiempo.

Las personas con el DA/DH necesitan formular metas a corto, mediano y largo plazo para mejorar sus finanzas personales, porque el manejo exitoso del dinero significa prestarles atenci�n a detalles.

Adultos con el DA/DH pueden gastar espont�neamente y sin aviso. As� que si sufre de este desorden evite usar tarjetas de cr�dito. No lleve su chequera consigo. Considere tener otra persona que firme en su cuenta de cheques o considere no cargar dinero adicional en efectivo.

Evite las tentaciones.

Identifique y mant�ngase alejado de �reas problem�ticas como centros comerciales, tiendas favoritas, exhibiciones de arte o de artesan�as. Lleve una lista cuando va de compras y no se salga de ella. Espere cierta cantidad de horas antes de hacer una compra.

Hay que tener cuidado en el diagn�stico del DA/DH, pues muchas personas podr�an escudarse tras el �supuesto� desorden, para justificar la desorganizaci�n en sus propias vidas, que no tiene nada que ver con el DA /DH, sino que es cuesti�n de estilo de vida, elegido conscientemente.

El diagn�stico y la educaci�n que sigue a la evaluaci�n puede ser una experiencia profundamente sanadora para quien sufre el desorden y puede ayudar a los adultos a poner las dificultades en perspectiva y a entender mejor las razones de muchos de los s�ntomas presentes durante toda la vida. Consulte un especialista.