Publicado el viernes 27 de agosto de 2004 - Edici�n No. 750 | Inicio | | Foros | Favoritos | Buzón | ? |
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FINANZAS

VIVA �CASH�

Existen dos grandes tipos de deudas: las necesarias, quiz�s inevitables, y las innecesarias o evitables

Jos� S. Canto
Asesor Financiero Personal

Estar endeudado es para mucha gente todo un estilo de vida; una forma �normal� de vivir. Muchas personas como toda su vida han estado endeudadas, ni siquiera piensan que podr�a existir otra vida mejor, financieramente hablando.

Las deudas no son un problema; mientras las podamos pagar. Se convierten en un dolor de cabeza enorme, cuando adem�s de no poderlas pagar, se unen a problemas como p�rdidas del empleo, gastos incontrolados, bajos ingresos, problemas de salud, problemas familiares.

Podr�amos decir que realmente existen dos grandes tipos de deudas: las necesarias, quiz�s inevitables y las innecesarias o evitables.

Las necesarias son aqu�llas que surgen como consecuencia de compromisos planificados, que por su naturaleza son demasiado grandes, por lo que no podemos asumirlas con el dinero que tenemos; ejemplo de esto es la adquisici�n de una vivienda. En este grupo existen otras que quiz�s no podemos eludir dadas sus caracter�sticas, tales como enfermedades repentinas muy graves, emergencias grandes, etc�tera.

Las innecesarias son deudas surgidas de nuestra decisi�n de adquirir cosas sin tener el dinero para ello, utilizando cr�dito proveniente de diversas fuentes.

Las personas se endeudan por mil razones, entre otras: efectos de la publicidad, inmadurez, falta de claridad en los valores personales, falta de criterios propios e informaci�n oportuna antes de tomar decisiones de endeudamiento, falta de planificaci�n y control del uso del dinero ganado o disponible, entre otras.

Evite endeudarse innecesariamente. Parta pregunt�ndose cu�ntas de las cosas que ha adquirido v�a endeudamiento realmente ten�an que adquirirse de esa manera. Usted sabe que no debe dedicar m�s del 20% m�ximo de sus ingresos al pago de deudas.

Las deudas pueden afectar la totalidad de su vida. Pensar qu� es lo que realmente esperamos de la vida, aclarar qu� es lo que en verdad nos produce satisfacci�n, analizar c�mo gastamos el dinero, son cosas que nos pueden ayudar mucho para evitar endeudarnos en demas�a y detener las deudas.

La reducci�n de su deuda comienza cuando se acaba el cr�dito; o sea, cuando cesa de hacer uso del cr�dito; cuando usted decide no comprar a cr�dito. Si no tiene dinero no compra. Viva �cash�. La mejor manera para hacer esto es �abstenerse�, salir a pasear sin tarjetas de cr�dito o con muy poco dinero para evitar tentaciones, planificar cuidadosamente cada gasto y llevar un control de los mismos.

Es muy f�cil darnos cuenta de que nos estamos endeudando sin control. A diario, si usted no se autoenga�a, recibe se�ales de que est� recorriendo el peligroso camino del endeudamiento: usa m�s cr�dito con m�s frecuencia; pide prestado para pagar deudas; no paga a tiempo algunos compromisos; a menudo solo paga el m�nimo en su tarjeta de cr�dito; no tiene ahorros ni para emergencias ni para nada, independientemente de su salario; su propio nivel de vida se ha reducido, pues ya no puede tener acceso a cosas que antes ten�a. Reconocer que tiene un problema o problemas financieros es un gran primer paso para tomar decisiones que lo ayudar�n a mejorar su situaci�n.

Cuando usted reconoce que hay problemas financieros que se avecinan, el primer paso es cobrar conciencia de su situaci�n financiera. Ponga en primer t�rmino de su prop�sitos de cambio, detener su pol�tica de endeudarse a toda costa y reducir en todo lo posible sus deudas.

Esto significa revisar su estilo de vida e introducir un plan de contenci�n de gastos; identificar todas las fuentes de ingresos actuales y por los pr�ximos meses; clarificar cu�nto adeuda y el costo de sus pagos mensuales; determinar cu�les gastos son necesarios y cu�les son evitables.

Busque maneras de incrementar sus ingresos (trabajando horas adicionales, si fuera posible). Reduzca gastos que no sean esenciales (comer fuera, hacer compras innecesarias, etc.). Lleve una cuenta minuciosa de sus gastos, el saldo de sus cuentas y fechas de pagos adeudados. Si pese a todo no logra mejorar, llame a sus acreedores y no espere que sean ellos quienes le llamen. Muchos acreedores est�n dispuestos a dar tiempo adicional para el pago de deudas, e incluso podr�n aceptar cuotas m�s peque�as para ayudarle a manejar mejor su deuda. D�gales honestamente cu�l es su situaci�n. No haga promesas que no pueda cumplir y prop�ngase cambiar su estilo para retomar el control de su vida.