La competencia esta dura

Ileana P�rez Burgos

Hab�amos decidido irnos a explorar nuevos sitios de diversi�n. Como se trataba de lugares de moda, hab�a que ir fashion. Yo siempre peco de no vestirme apropiadamente para la situaci�n, as� que planch� mi poncho de chif�n, retoqu� mis rizos con una tenaza, me puse mis zapatos de Shrek (turquesa con verde) y me apliqu� full make-up (cosa rara en m�).

Dando vueltas en el bar del Dec�polis, mientras trataba de divisar a mis amigas, me di cuenta que all� casi todas ten�an pinta de modelo o de mujer cosmopolita de Nueva York. Hab�a mucho cabello rubio, cuerpos delgados y ropa negra. Mmmm, es bueno ver el terreno, pens�, y me sent� algo aliviada de que con mis rizos oscuros y mi ropa celeste marcaba cierta diferencia. Por fin, encontr� a mis amigas en el �rea del restaurante y nos sentamos a comer, beber vino y ponernos al d�a.

A la salida, mientras esper�bamos a que el valet trajera el auto, vi entrar a tres mujeres con busto de silicona (tan perfecto que natura no lo hace), flaqu�simas, con el cabello picado, y con blusas tejidas sin nada debajo (ni sost�n). As� no hay competencia que valga, pens�. Ante eso, no val�an ni el chif�n, ni mis rizos... Y eso que nunca he sentido ganas de tener senos m�s grandes ni de andar casi desnuda. Pero si la ponen a una arreglada, pero normalita, al lado de una modelo de piel expuesta, �a qui�n creen ustedes que correr�n a hablarle los hombres?

Me sacud� el mal pensamiento y segu� rumbo a Buzz, una disco blanca e iluminada, donde desde cualquier esquina puedes ver a todos los que est�n en el lugar. All� se va para ser visto y eso no lo sab�a yo. Los estilos de mujeres eran mixtos, desde el desfachatado look agringado de �me puse lo primero que encontr� y de la que se fue de la oficina a Fridays y de all� a la disco hasta la que se puso su ropa m�s fashion y escotada, esa capaz de poner en duda una reputaci�n.

Al d�a siguiente, le coment� a mi mejor amiga: �la competencia est� dura; �c�mo hace una frente a esos cuerpos?�. Ella hab�a ido a la est�tica esa ma�ana y hab�a visto pasar a unas extranjeras de melenas rizadas rubias y cuerpos de sirena, y casualmente hab�a pensado lo mismo que yo. Y eso de que las bonitas son tontas, je je, es un gran mito. No creo que Cindy Crawford y Catherine Zeta-Jones tengan un pelo de tontas, ni qu� decir de varias amigas de una que andan regias por la vida y son tremendas profesionales.

S�, queridas, el nuestro es un mundo de desigualdades. No nacemos igualmente bellas (seg�n el patr�n de est�tica moderno); en cambio la presi�n social por entrar en ese canon s� que nos afecta a todas. Para colmos, algunas s�, otras no, tienen tiempo para hacer ejercicio, hacerse un facial al mes y darse un ba�o de burbujas cada atardecer. Igual que algunas s�, otras no, cuentan con los recursos para pagarse el blower y la manicura (por lo bajito) y la microabrasi�n o la cirug�a pl�stica (por lo alto).

El punto es que cada d�a hay m�s mujeres bellas. Y ante eso, �qu� hace la mujer de guapura y presupuesto normalito?

Hasta donde yo tengo entendido, la competencia es buena, porque la hace a una ponerse en las pilas.

Claro que, reaccionar y mejorarse cuesta, �acaso no han visto c�mo sudan los empresarios cuando les sale un nuevo competidor? As� que... no hay tiempo que perder. Lo primero, lo principal, es identificar las fortalezas. Cada mujer tiene una combinaci�n de atributos �nica, sea cabello rizado con caderas anchas, nariz perfilada con hombros huesudos, cuello largo con cabello lacio... Lo segundo, reconocer las debilidades (�Y hacer algo respecto a ellas!)

Y eso s�: Nada de tirarse a llorar porque �no tengo plata o no tengo tiempo para tal cual o cosa que me har�a m�s bella�. Las mujeres somos recursivas, ustedes lo saben. En mi caso, si alguna me quiere sacar el ojo con su silicona, yo la empujar� con mi cadera, que s� es de verdad, verdad.