LOS ITALIANOS SE EXTINGUIRAN

Las mujeres italianas no tienen m�s hijos porque los hombres se niegan a compartir la crianza. Al menos, esa es la conclusi�n a la que arriban varios investigadores tras haber estudiado el fen�meno en varias provincias italianas. En Laviano, Salerno, la administraci�n comunal ofrece 10,000 euros, en un lapso de cinco a�os, por cada reci�n nacido. A pesar de este incentivo, en los primeros meses del 2004, solo se verific� un nacimiento. La tasa de natalidad en Italia es de 1,23 por mujer, la segunda m�s baja del mundo occidental.

Son raros los casos donde existe un segundo hijo. Si semejante tendencia contin�a, los italianos, lenta, pero seguramente, se extinguir�n. Seg�n Leticia Mencarini, docente de Estad�stica de la Universidad de Florencia, que entrevist� a m�s de 3,000 madres en cinco ciudades diferentes, �las mujeres est�n dispuestas a tener un segundo hijo, siempre que el padre colabore en las tareas dom�sticas y en la crianza del ni�o�.

Sin embargo, la mayor�a de los hombres italianos hace poco y nada para contribuir a las tareas de la casa. En consecuencia, y luego del primer hijo, las mujeres se declaran en huelga. Al parecer, los hombres italianos quieren que sus mujeres se ocupen de los ni�os, tal como lo hicieron sus madres con ellos, algo que resulta absolutamente imposible. Las mujeres necesitan y quieren trabajar fuera del hogar y no desean sacrificarse convirti�ndose en amas de casa.

GOLPE DE DADOS

Maratonista del agua El atleta Wolfgang Kulow (delante), seguido por Stefan Schlett, camina tras la salida del primer marat�n bajo el agua en el fondo de una piscina en Lensahn, Alemania. Kulow, quien junto a Schlett recorri� el a�o pasado 600 kil�metros a trav�s del desierto chino de Taklaman, ostenta el r�cord de caminar bajo el agua, necesitando 24 horas para 42 kil�metros.

El golf en China Unos visitantes observan los stands y diversos objetos expuestos en la Feria de Comercio Internacional de Golf en China. China se ha convertido en el centro de atenci�n del mundo del golf en un momento en el que se est� ejerciendo presi�n para que sea un deporte oficial en los Juegos Ol�mpicos del 2008 de Pek�n. Sin embargo, los l�deres chinos han vetado la construcci�n de m�s campos de golf y la inversi�n especulativa. Desde hace 20 a�os existen ya unos 200 campos de golf, con m�s de 1,000 planeados para un futuro.

�MAL DE MUJERES� TAMBIEN ATACA A HOMBRES

Las mujeres padecen en general mayores des�rdenes alimenticios que los hombres. Pero los hombres tambi�n pueden sufrir por la bulimia, atracones y, en menor medida, anorexia, de acuerdo con investigadores.

Leigh Cohn, coautor de Making Weight (Aumentando de peso) cree que esos des�rdenes afectan a un 2% de los hombres y a entre el 4% y el 5% de las mujeres, y est� convencido de que el porcentaje est� en aumento para el sexo masculino.

Los atletas, cuyo peso es clave para su desempe�o deportivo, como los jinetes, luchadores, corredores de larga distancia y gimnastas, tienen una mayor incidencia de problemas alimenticios.El origen del mal puede ser similar para ambos sexos: gen�tico, falta de autoestima, trauma e influencias culturales.

Al igual que las mujeres se sienten presionadas para lucir como las esbeltas modelos de las revistas, los hombres pueden verse influenciados por im�genes de hombros anchos y cinturas estrechas. Las fotograf�as de cuerpos perfectos pueden reforzar la creencia de que los cuerpos �normales� no son los correctos, de acuerdo con los expertos.

Un sorbo de humor

- Tener la conciencia limpia es s�ntoma de mala memoria.

- Pez que lucha contra la corriente, muere electrocutado.

- Si la monta�a viene hacia usted, �corra! �es un derrumbe!

- Errar es humano, pero echarle la culpa a otro, es m�s humano todav�a.

- Yo no sufro de locura, la disfruto a cada minuto.

- La verdad absoluta no existe, y eso es absolutamente cierto.

- Trabajar nunca mat� a nadie, pero, �para qu� arriesgarse?

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Una solterona le pide un consejo a su amiga:

- ��C�mo hago para que la gente deje de molestarme con: cu�ndo te vas a casar?�.

La amiga le responde:

- Mis t�as sol�an acercarse a m� en las bodas, d�ndome golpecitos en las costillas y diciendo: Eres la siguiente...

Dejaron de hacerlo cuando yo empec� a hacer lo mismo, en los funerales.