Publicado el viernes 14 de mayo de 2004 - Edici�n No. 735 | Inicio | | Foros | Favoritos | Buzón | ? |
Secciones  
Bazar
Sólo para ellos
Ventana abierta
La vida en fucsia
Esta semana
Rostros
Finanzas
Belleza
Salud
Lista de Ellas
Diario de mamá
Moda
Evento
De la cocina
Horóscopo
Ediciones anteriores
Suplementos  
Martes Financiero
Pulso de la Nación
Sábado Espectacular
AprendoWeb
DIARIO DE MAMA

DE LA COMPRA SELECTIVA

�Libertad, consiste en la habilidad de escoger�. Simone Weil

Julieta de Diego de F�brega

Si hay algo a lo que tenemos acceso hoy en d�a es a la educaci�n informal. Charlas, seminarios, cursos cortos y todos sus parientes aparecen anunciados a diario en todos los peri�dicos. Quien tenga ganas, tiempo y dinero puede aprender a cocinar por la ma�ana, a soplar vidrio por la tarde y a identificar sus vidas pasadas en la noche. As� de f�cil.

La pregunta que surge es �C�mo acomodar tanta informaci�n dentro de la corta vida que nos han regalado? Porque lo cierto es que la oferta es diversa, muy diversa, y esto puede confundirnos, especialmente a los curiosos que quieren ir a todo. Y si adem�s de curioso usted es d�bil de car�cter, pues imag�nese lo que puede pasar: Hoy decidir� que es prudente obligar a sus hijos a comer espinaca tres veces por semana; ma�ana empezar� a tomarse 20 vasos de leche por semana y pasado optar� por que todo el mundo se alimente solo de carne y jugo de naranja.

Yo pienso que educarse es un poco como ir de compras: no hay que meterlo todo en la canasta. Podemos mirar, comparar precios, determinar necesidades y luego escoger. Recuerdo unos consejos muy sabios que me dio en una ocasi�n una profesora de Educaci�n para el Hogar: �uno no debe ir al supermercado sin haber comido antes ni de compras cuando est� triste�. Claro, tiene todo el sentido del mundo, en ambas situaciones usamos el ejercicio como un consuelo y los resultados ser�n inexorablemente un gasto innecesario.

Seguro usted est� pensando, �pero bueno, �qu� puede haber de malo en una actividad educativa?�. En principio nada, a menos que implique un cambio radical de vida que no necesariamente sea el m�s conveniente para nosotros. �Y todos conocemos a alguien supremamente susceptible que ha practicado, por ejemplo, todas las dietas, todas las religiones, todos los tipos de ejercicio, todas las corrientes psicol�gicas, siempre con vehemencia y argumentando que son, en ese momento, la �nica respuesta l�gica a �x� o �y� problema o situaci�n.

Regreso a la actividad de compras y me imagino yendo al supermercado y metiendo en mi canasta uno de cada uno de todos los productos que all� venden; o visitando Los Pueblos y haciendo lo mismo. No habr�a ni auto ni casa que pudiera contener toda esa mercanc�a. Hay que escoger, que tomar decisiones.

Reconozco que soy bien curiosa y me encanta escuchar charlas y propuestas novedosas, pero ya he aprendido que cuando voy no necesariamente tengo que hacer propio todo lo que all� proponen. Lo que me sirve lo meto en la canasta y lo que no se aplica lo dejo pasar. As� de f�cil. Hay que ser selectivo, de lo contrario, nuestra vida se convertir�a en un pulguero como el de Sanford & Son.

Reconozco tambi�n que a veces es dif�cil dejar pasar un concepto porque su expositor es un genio de la palabra y nos tienta con su elocuencia, pero �hello!, nosotros tambi�n tenemos cabeza para pensar, no solo para que nos hagan peinados bonitos. Aquellos de ustedes que sean observadores se habr�n dado cuenta de que entre menos ch�cheres tengamos, m�s f�cil la vida; con las ideolog�as es lo mismo. Es mejor escoger una y perfeccionarla, en lugar de ser un poquito de todo y no mucho de nada.

El truco en todo esto reside en que para poder escoger inteligentemente es conveniente analizar todas las opciones y es all� donde podemos confundirnos, especialmente si estamos tristes y con hambre. A mi siempre me pareci� que las clases de Educaci�n para el Hogar era una p�rdida de tiempo, pero acepto con humildad que el haber aprendido all� el arte de comprar eficientemente ha resultado ser un concepto de mucha utilidad, no solo para ir al supermercado.