La guerra de los sexos

Guido Bilbao

Cada vez son menos los espacios masculinos. Cada vez son menos las cosas que se nos permiten. A Panam� ya no llegan bailarinas a desnudarse, sino musculosos streepers desde Puerto Rico. En el Parque Omar, para jugar al f�tbol los s�bados, hay que esperar que las chicas se aburran de hacerlo, y si tienen ganas, nos dejen el c�sped libre. Los hombres parecemos seres inservibles que solo mienten y vac�an la heladera, que ensucian todo y solo se ocupan en beber. Homeros Simpsons multiplicados hasta el hartazgo. Y para empeorar todo, llegan las �ltimas noticias, realmente graves. Se podr�a decir que si no hacemos algo, terminaremos arrumados en galpones, como los autos viejos y rotos, seremos elementos en desuso, qui�n sabe, carne de reciclaje. Escuchen esto y saquen sus propias conclusiones.

Orgasmatron. El Gobierno de Estados Unidos acaba de autorizar a Stuart Meloy a que pruebe su invento en mujeres. �Qu� es el orgasmatr�n? Es un dispositivo que se implanta en la columna, y a trav�s de un control remoto, dispara el orgasmo. S�, as� como escuchan. El dispositivo recibi� este nombre por un aparatito similar que se utilizaba en la pel�cula Barbarella de Jane Fonda. Pero esto no termina aqu�.

El Tri-gasm. El 25 de noviembre se present� lo que llamaron el descubrimiento m�s importante desde que en los 50 se detectara el Punto G: el tri gasm, �la �ltima forma del poder femenino�. Este aparatito es un consolador ultrasofisticado que, en medio del cl�max, estimula al un�sono el punto G, el cl�toris y el ano. �El resultado es el m�s intenso, satisfactorio y completo orgasmo que una mujer jam�s haya experimentado�, explic� su creadora, la sex�loga Ava Cadell. Y agreg�: �Es hora de que las mujeres se hagan responsables de sus propios orgasmos�.

La pregunta es: �Y nosotros, de qu� nos disfrazamos en esta fiesta? �Qu� vamos a hacer cuando nuestras novias y esposas giman a los gritos a trav�s del control remoto y, en contrapartida, se rasquen las rodillas o se pinten las u�as mientras nosotros sudamos y sudamos esforz�ndonos por arrancarles un t�mido: �ay? Si el Viagra lleg� para refortalecer a los hombres, y por eso tambi�n benefici� a las mujeres, este tipo de inventos solo nos lleva a la distancia, la incomunicaci�n y la ampliaci�n de los miedos y traumas que tanto se combatieron durante la revoluci�n sexual. Es decir, juguetes que nos alejan del juego. Aunque las mujeres lleguen al orgasmo como leonas rugientes, estos m�todos nos ponen a vivir en cuartos separados. Finalmente, presenciamos la transmutaci�n femenina. Se est�n convirtiendo en lo que tanto han recriminado. Obnubiladas por el orgasmo, se olvidan del amor, de la b�squeda conjunta del placer. Podr�a decirse que parecen hombres prehist�ricos. Pero no se crean que ser� tan f�cil.

La contraofensiva

Sin embargo, tambi�n puede se�alarse otro proceso, tan ruin como el anterior, que pone en juego la supervivencia del g�nero femenino. El aumento de la oferta sexual de los travestis en todos lados del mundo est� poniendo en jaque a la prostituci�n femenina. Las pel�culas pornogr�ficas cada vez los utilizan con mayor asiduidad y las t�cnicas m�dicas que realizan los cambios de sexo hacen que, en no mucho tiempo, las diferencias entre los transformistas y las verdaderas mujeres sean realmente pocas. Y si a esto le sumamos el horizonte cient�fico, que alumbrar� un mundo nuevo a trav�s de la clonaci�n, podemos concluir en que las mujeres tambi�n tienen cosas que temer.

La guerra de los sexos se desat� hace rato y no para. Y m�s all� de estas especulaciones, lo cierto es que muchas veces la posibilidad de un destino com�n se vuelve imposible, en medio de tanta belleza idealizada, en medio de tanto ego�smo e incomunicaci�n. En su libro Las part�culas elementales el nuevo ni�o maldito de la literatura francesa, Michel Houellebecq, pone a los clones a hablar. �Eran torpes los humanos y ego�stas. Pero nos enternece esa b�squeda infructuosa y tan importante para ellos de eso que no sabemos qu� era pero que llamaban amor�. �Seguir� existiendo esta b�squeda en medio de tanto invento?

Un sorbo de humor

Orgasmos femeninos

Asm�tica: �Uhh... uhhh... uhhh!
Geogr�fica: �Aqu�, aqu�, aqu�!
Matem�tica: �M�s, m�s, m�s!
Religiosa: �Ay Dios m�o, ay Dios!
Suicida: �Me muero, me muero!
Homicida: Si paras, �te mato!
Porrista: �Dale... dale... dale!
Profesora de ingl�s: Oh... yes, oh... good...
Negativa: �Nooo, noooo!
Positiva: �S�... s�... s�!
Profesora: S�... eso... por ah�... muy bien... correcto... perfecto.
Desinformada: �Qu� es esto?... �Por qu�?... �Qu� me haces?
Analista de sistemas: OK. El proceso ha finalizado con �xito.
Clarividente: Lo siento venir... ya casi viene... lo veo, lo veo.

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Momentos post orgasmo

El momento mexicano: ��Te juro que es mi primera vez!�.
El momento secreto: ��J�rame que no le vas a decir a nadie!�.
El momento optimista: ��Me hablas ma�ana?�.
El momento adolescente: ��V�stete, ah� vienen mis papas!�.
El momento social. ��y t�, c�mo te llamas?�.
El momento de negocios ��cu�nto te debo?�.
El momento de credibilidad, �ahora s� te creo que eras virgen�