Eran los rostros de distintos noticieros televisivos locales y por diferentes razones decidieron dejarlas pantallas. Lisette Condassin, Cindy Pereira, Judy Meana, Vanessa Calviño y Marta Alvarado cuentan a qué se dedican en la actualidad.

De la década de 1980 al presente, los diferentes canales de televisión local –a través de sus noticieros– nos han mostrado un desfile de rostros y voces tanto de hombres como de mujeres; entre las caras femeninas unas han calado en sus televidentes más que otras, al punto de que, a pesar de que hayan pasado siete años, aún no pueden pasar inadvertidas en el supermercado o cuando andan de compras.

Al lobby del Sheraton Panama Hotel & Convention Center llegaron, una a una, Judy Meana, Cindy Pereira y Lisette Condassin. Vanessa Calviño y Marta Alvarado no pudieron llegar a la cita por contratiempos laborales y por compromisos previos, respectivamente.

Fue obvio que la entrevista funcionó como una especie de reencuentro entre las tres ex presentadoras de noticias que se reunieron en el hotel. Es más, cuando se incorporó Lisette Condassín al coloquio hubo que hacer un receso para los saludos. En fin, con este ejercicio también entre ellas se pusieron al corriente de lo que ha sucedido en sus vidas.

Rompiendo el hielo

Judy Meana llegó con una amplia sonrisa y, en cada oportunidad, decía algún jocoso comentario, se puede decir que se encargó de hacer la cita amena, mientras cada una pasaba por el interrogatorio.

Judy es la directora encargada de Información y Relaciones Públicas de la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre. Pero su carrera como periodista y comunicadora social comenzó en 1995 en Telemetro.

‘Yo me formé en Telemetro, Canal 13, en donde primero me desempeñé como reportera y luego me dieron la oportunidad de presentar un noticiero, porque ya tenía ese plus que te da el estar en la calle, cubriendo noticias y entrevistando a la gente’, lugar en el que estuvo formalmente hasta el año 2001, pues pidió una licencia porque había obtenido una beca para ampliar estudios en España. A su regreso, RCM Canal 21 le hizo una propuesta y estuvo con esa empresa hasta 2004. Ese mismo año entró a trabajar en el gobierno del presidente Martín Torrijos Espino.

‘Pedí una licencia para trabajar en el Gobierno, me ofrecieron ser la directora de información del Ministerio de Gobierno y Justicia, me dijeron que iba a tener la oportunidad de conocer cómo se manejaba la información en otros países o en estado de crisis en el Pentágono y sí lo pude hacer. Al irme a trabajar al ministerio estaba aceptando un reto’.

Luego del 23 de octubre la atención pública se ha posado sobre la ATTT; ella indica que debido a su entrenamiento en crisis se le encomendó la Dirección de Información y Relaciones Públicas, actualmente tiene cinco meses de laborar en esta institución.

Sin embargo, cuando se le preguntó si quisiera regresar a la televisión, dijo ‘yo siento que nací para eso’.

Para ella lo más chistoso que le ha dejado su paso por las pantallas es encontrarse con personas que le dicen que aún sintonizan su noticiero y que la llamen ‘Cindy, Lucy, Jenia’, cuando no se parece en nada a ellas.

Con respecto a su vida familiar, dice que siempre ha sido importante para ella, pero que su clave para atender a su familia con calidad es ser una mujer organizada. Judy está casada con Roberto Carles y la cigüeña ya le ha traído dos hijos, una niña de nueve años y un niño de 10 meses.

La reina

Así llamó Judy Meana constantemente a Lisette Condassín mientras duró el encuentro. Y es que, a pesar de que hace siete años dejó de presentar noticias, aún cuando va al supermercado o se sienta en la silla de una sala de belleza, puede escuchar comentarios como ‘cuando tú leías noticias yo te odiaba, porque la hora de la pelea en mi casa era el noticiero, mi esposo no dejaba ver otros noticieros porque decía que él tenía que verte, ver esos ojos, escuchar esa voz’. Y no es para menos, Lissete estuvo al frente del noticiero estelar de RPC, Canal 4, por 13 años (de 1987 a 2000).

Ella dice que esta carrera que ha desarrollado en periodismo y comunicación social es de total vocación y comparte que para ella una de las más increíbles emociones que guarda de la televisión fue el sentarse al lado de Arquimedes Fat Fernández. Para ella fue un orgullo presentar un noticiero estelar al lado de él. ‘Yo decía, Señor, ampárame, dame luz, para no quedarme muda al lado de esta eminencia, que [yoI cumpla las expectativas’, dijo Lisette acordándose de sus años como novata. A la vez recuerda lo triste que fue en el período de la dictadura, donde se veían obligados a leer ‘la biblioteca que tal ministerio inauguró’ o las prácticas que realizaban las Fuerzas de Defensa.

Lissette considera que los años que estuvo en el canal que se identificaba en aquel entonces con una huaca fueron fundamentales para su carrera. Luego de recibir halagos y galardones nacionales como comunicadora, Lisette decidió irse a trabajar como jefa de prensa de la Presidencia durante unos meses en el gobierno de Mireya Moscoso. Luego trabajó con la tabacalera Philip Morris y, desde hace cuatro años, está como gerente de Relaciones Públicas del Banco Continental, departamento que creó a su llegada a esta institución bancaria.

Señala que, en este mundo globalizado, no hay trabajo de 8:00 a 5:00 y que no fue por cuestión de buscar un trabajo menos estresante que dejó la pantalla. Aunque dice que ahora disfruta de tener los días feriados que normalmente la gente tiene.

Ella confirma que el teatro forma parte intrínseca de su vida, sin embargo, menciona que también es un compromiso con su familia, porque le roba tiempo, pero comenta que su esposo e hijas saben cuánto significa el teatro para su vida, entonces, son los primeros en estar en primera fila cuando tiene una función.

Con los proyectos musicales como Vive la música, dice que ha descubierto en ella una nueva vocación: la enseñanza. ‘Me encanta enseñar, transmitir lo que sé’, explica, y añade que instruye a los participantes en proyección escénica e interpretación para que manejen los nervios.

En sintonía con los niños

¿Recuerda a Cindy Pereira? ¿Le causa curiosidad qué ha sido de la joven que tenía un segmento llamado ‘entrega especial’? Ella contrajo matrimonio con Edgar Rovetto hace ocho años, tiene una hija, de cuatro años, y hace tres meses dio a luz a un varón. Dice que su esposo también está vinculado a los medios, por eso se conocieron y por eso la comprende. De sus momentos como presentadora de noticias dice que algo que la satisfacía como ser humano era el segmento de ‘entrega especial’, con este se trataba de ayudar a personas necesitadas y veía que los panameños respondían positivamente a estos casos.

Sin embargo, la contracara es que ‘me dolía tener que sacrificar momentos muy importantes en mi vida, así como a la familia, por estar trabajando’.

‘Leí noticias por cinco años: un año en [Televisora NacionalI, canal 2, y cuatro en Telemetro, Canal 13, estaba en la edición nocturna’, expresa Cindy antes de contar por qué dejó el noticiero. ‘Dejé las noticias cuando la presidenta Mireya Moscoso me ofreció la oportunidad de irme a trabajar con ella. Acepté el reto, quería experimentar el otro lado de la barrera y ver cómo era. La verdad que la experiencia fue enriquecedora, intensa y siento que fue una oportunidad única. Conocí lugares que ni tenía idea que existían en nuestro país’.

Al finalizar el gobierno de Moscoso, Cindy empezó un programa para niños y familia en radio y televisión, junto a Estelita Villarreal. Y posteriormente le llegó una oferta para ser gerente del piso de niños de Extreme Planet. Cuenta Cindy que aceptó porque ser mamá y el estar involucrada con niños es la nueva etapa de su vida, y allí continúa.

Mas no deja de pensar en su carrera de periodista. ‘De niña soñaba con ser reportera de guerra’y ahora, de grande, le gustaría incursionar en el periodismo investigativo, pues considera que el haberse desempeñado en otras ramas de su carrera la han hecho crecer como periodista.

Mente de negociante

En casa de una amiga en común, se conocieron Vanessa Calviño y Luz María Noli, ese día Noli le convidó a ir a realizar una prueba a Televisora Nacional. La oportunidad de ser presentadora de noticias de TVN le llegó a Vanessa siendo estudiante de Contabilidad y lo que inició como una prueba se convirtió en la carrera profesional que ha desempeñado Vanessa hasta el momento.

‘Inicié en 1997 en Televisora Nacional, Canal 2, luego de pasar un entrenamiento en locución a cargo de la profesora Arbezú. Luego comencé a leer en el noticiero matutino en compañía de Pablo Bustamante. Allí, leí hasta el año 2005’, cuenta Vanessa.

Pero en 2006 se le vio en la cadena RCM, donde presentaba en un programa tipo revista, en el que permaneció por 18 meses, aproximadamente. Ella dejó este último trabajo, porque ‘Riande Production necesitaba que me dedicara más tiempo a ese trabajo y, en estos momentos, no tengo esa disponibilidad. En el caso de Canal 2, opté por dejar la televisora, porque quería trabajar en la parte administrativa de un medio y, en ese momento, me ofrecieron la oportunidad, y así lo hice, dejé después de siete años lo que consideraba era parte de mi identidad y mi pilar profesional’.

Vanessa desmiente que haya sido asunto de familia la causa de que haya dejado las pantallas, pues siempre se ha mantenido trabajando y además tiene un negocio propio, una tienda de maquillaje.

‘La verdad es que siempre tengo trabajos paralelos, ahora mismo estoy como directora de Comunicación y Relaciones Públicas del Ministerio de Gobierno y Justicia. Y nunca dejo de trabajar, para mí el trabajo se debe disfrutar, pese a los inconvenientes que puedas tener’.

Cuenta que al estar al frente del noticiero muchas veces llegaba a la casa extenuada, triste e incluso de mal humor y cuando se ponía a evaluar el día, se daba cuenta de que era por la cantidad de noticias trágicas en un día determinado. Ella accede en que ‘lidiar con noticias, para aquellos que somos sensibles, cansa definitivamente. Más porque en ese entonces los noticieros se cuidaban mucho más’.

‘No creo que mi carrera en televisión haya terminado -opina Vanessa- necesitaba ganar experiencia en otros roles que en nada se alejan del entorno de la comunicación en el que siempre me he manejado’.

Vanessa también combina su rol profesional con su vida familiar, pues está casada con Pradip Chugani y esta semana estuvieron de aniversario. ‘Tengo dos hijos: Dilan Sunderdas Chugani, de siete años, y la pequeña Farah Isabella Chugani, de tres años.

Cuando se le llamó para confirmar la entrevista, casi no se escuchaba pues estaba jugando bolos con sus hijos y la algarabía era enorme. Según ella, necesita de sus hijos para retomar fuerzas y cargar sus baterías para enfrentar el día a día.

Ciudadana responsable

Si piensa que Marta Alvarado está de vacaciones, pues sepa que no es así. Hace cuatro meses que dejó de ser uno de los rostros del noticiero estelar de RPC, Canal 4, medio que fue su casa laboral. ‘Trabajé en RPC Televisión desde 1997 hasta 2007 (casi 10 años); pero no fue hasta 1999 cuando empecé a ser presentadora; antes fui redactora y reportera’, dice. Marta presentó el noticiero matutino de 6:00 a. m. a 8:00 a. m. , de 1999 a 2002 y, desde 2002 hasta enero de 2007, el estelar, en la tarde.

Asimismo, explica las razones que la llevaron a dejar las pantallas. ‘Desde hace un par de años me había interesado el tema de la responsabilidad social; de hecho dentro de Medcom estaba trabajando en la Dirección de Asuntos Corporativos, donde se desarrollaban los proyectos sociales de la empresa. Se me presentó la oportunidad de entrar a trabajar de lleno en esta área y decidí tomar el reto’, indica que este es solo uno de los motivos que influyeron en su decisión.

‘Además, ser presentadora del noticiero estelar implicaba llegar todos los días a mi casa después de las 8:00 de la noche y siendo madre de 3 niños es una realidad difícil de manejar. Mi hija acaba de entrar a pre-kinder y ya tiene que hacer tareas; con mi anterior horario era imposible poder ayudarla. Ahora hay días en que puedo llegar a mi casa todavía con la luz del sol, jugar con mis hijos y ayudar a mi hija en sus tareas’, señala Marta. Si se compara con su anterior trabajo, esto representa una significativa diferencia, pues aquel demandaba en un día normal ‘11 horas y si pasaba algo como una protesta, un incendio, una inundación o algo así me quedaba hasta que terminara la transmisión. Cuando eres periodista sabes a qué hora entras, pero nunca a qué hora sales’.

Marta tiene una familia grande, está casada desde hace seis años con el camarógrafo Edgardo Previa, tiene tres hijos: una de cuatro años y unos mellizos de 10 meses. ‘Además mi esposo tiene un hijo de 10 años que vive con nosotros. Así que en total podría decir que son cuatro’.

Marta Alvarado es ahora Gerente de Asuntos Corporativos de Fiesta Casino, donde desarrolla los proyectos de responsabilidad social. Lo que no es extraño, pues para ella ayudar a una mujer a recuperar a sus hijos fue la mayor satisfacción que le dejó su rol de reportera. ‘En 2001, recibí un correo de una madre que me contaba que sus hijos estaban secuestrados por el padre en Pakistán. Ella estaba desesperada pues había ido a diferentes oficinas del Gobierno y nadie le hacía caso. Yo le hice un reportaje y luego que salió al aire la atendieron en la Cancillería y ocho meses después la señora recuperó a sus hijos.