No es por la paga

El esp�ritu y el esfuerzo del trabajo voluntario se hace cada vez m�s evidente y necesario

Roxana Mu�oz

Voluntarios de AFS junto a los jóvenes de intercambio.

AFS, organizaci�n internacional que lleva a cabo programas de intercambio cultural, enviando a j�venes estudiantes al extranjero para que convivan con una familia en otros pa�ses y viceversa, es un proyecto cuya columna vertebral la compone la disciplina de sus voluntarios.

Solo en Panam� hay 35 comit�s locales, cuyo sost�n principal es el esfuerzo de los que donan su tiempo. Son ellos quienes ayudan a captar los estudiantes, participan en la capacitaci�n y les brindan abrigo y cari�o durante su estad�a en Panam�. En su mayor�a son los estudiantes ex participantes del programa y sus padres quienes participan como voluntarios.

Edith Moreno, quien vive en Boquete, Chiriqu�, conoci� AFS en 1982. Le interes� que su hijo participara en el programa; efectivamente, al a�o siguiente �l viajo a Estados Unidos, pero cuando �l regres� Edith no cerr� el cap�tulo y decidi� seguir apoyando la organizaci�n. Recibi� a dos estudiantes estadounidenses en su casa y luego dej� de hospedar para realizar un trabajo m�s organizativo, hoy d�a ella coordina el programa en Boquete: recluta los estudiantes chiricanos que desean participar en el intercambio, participa en las labores de capacitaci�n y tambi�n recibe a los j�venes extranjeros que hacen su estad�a en Boquete y les busca familia para que los albergue.

Para Edith, quien perdi� a su esposo hace un a�o, este trabajo es otra forma de realizarse. �La �nica manera de que puedas hacerlo bien es creyendo en esto�. El grupo de AFS se ha convertido en su segunda familia.

La prueba m�s evidente de que su trabajo vale la pena se revela ante sus ojos al ver los lazos tan fuertes que surgen entre los j�venes y sus familias adoptivas.

Una de las estudiantes de intercambio con las que mantiene correspondencia constante es Laura. �Ella vino de Australia hace unos cuatro a�os. Cuando lleg� a Boquete, despu�s de 48 horas de vuelo y del viaje por carretera desde la capital, se encontr� con una lluvia pertinaz, todo estaba nublado�. Ante semejante panorama aflor� m�s que nunca la nostalgia por su familia en Australia y empez� a llorar a mares.�Sali� mi instinto maternal y la abrac� con fuerza�, recuerda Edith.

Meses despu�s, cuando Laura empez� a acostumbrarse y a querer a su nueva familia, no dejaba de recordar con sonrisas ese primer d�a en que tanto lloraba. Despu�s de ese viaje, Laura ha vuelto varias veces a Panam�. En el 2001 mientras ella estudiaba en Estados Unidos, ocurri� el atentado terrorista del 11 de septiembre. Sus padres le pidieron que volara de inmediato y se quedar� con �su familia de Panam� hasta que todo estuviera tranquilo.

La nueva tendencia: ayudar

Ni�os beneficiados del programa Alumnos apoyando a Alumnos.

Aunque pareciera que en nuestro pa�s el ser voluntario no es una costumbre, las cosas parecen estar cambiando. En las escuelas secundarias se ha hecho obligatorio el cumplir con ciertas horas de servicio social antes de graduarse. Grandes compa��as se han unido a esta corriente de responsabilidad empresarial y manejan con su empleados sus propios proyectos de voluntariado o participan en los que ya existen.

Debbie Psichoyos est� al frente del programa �Alumnos apoyando Alumnos�; el objetivo es captar estudiantes de escuela secundaria para que durante el verano reparen o den mantenimiento a una escuela de escasos recursos. Adem�s deben seleccionar las escuelas beneficiadas del proyecto, las cuales han ido aumentando con el paso de los a�os.

Pero la tarea no se limita a lijar bancas, pintar paredes y arreglar tableros. El programa involucra a los ni�os que asisten a la escuela y los voluntarios se encargan de impartirle talleres de baile, manualidades y otras expresiones art�sticas.

Psichoyos cuenta que en su tercer a�o, el programa est� involucrando tambi�n a maestros y padres de familia de la escuela beneficiada. Al hacer participar a la comunidad en los arreglos de la escuela, esta se hace m�s consciente de su cuidado y mantenimiento. �Pero no todo es trabajo, es a la vez un espacio de esparcimiento donde los ni�os tambi�n se divierten y aprenden�.

Cuando los j�venes, sobre todo de escuelas privadas, participan en este tipo de programas, aprenden a valorar las oportunidades que tienen. �Con ello desarrollan empat�a y de alguna manera se estrecha la brecha entre escuelas p�blicas y privadas�, opina Debbie.

El voluntariado llega a la empresa

Para Lineth La�as la oportunidad de convertirse en voluntaria lleg� hasta su empresa. La compa��a para la cual trabaja, KPMG, es desde hace unos a�os patrocinadora del programa Junior Achievement, que promueve entre los estudiantes la iniciativa empresarial, ense�ando desde conceptos b�sicos de econom�a hasta c�mo desarrollar y poner en pr�ctica una empresa rentable.

Junior Achievement llega a los estudiantes a trav�s de voluntarios dispuestos a orientar y capacitar, esa mano colaboradora proviene de los empleados de las mismas empresa patrocinadoras del proyecto, que ya son m�s de treinta.

Desde que se inscribi� como voluntaria, Lineth, gerente de recursos humanos en KPMG, es tambi�n asesora de los grupos de primaria que participan en Junior Achievement. Ya ha trabajado con ni�os de primer grado en el colegio Anglo Mexicano, con estudiantes de V en la Escuela Jap�n y con chicos de segundo y de kinder en la escuela Ricardo Mir�. Cada a�o un grupo distinto. ��Wao, son cuatro a�os!� se sorprende ella al hacer la cuenta.

Ella est� segura de que el trabajo que hace redundar� en beneficio de estos ni�os �y de un Panam� mejor�. Pero adem�s de ense�ar, est� aprendiendo. �Uno est� en un mundo de adultos, y al estar con los ni�os tienes que verlo todo con sus ojos, debes estar agachada casi todo el tiempo para hablarles a su nivel y descubres como en cada edad son diferentes�.

A los ni�os de kinder les estuvo ense�ando la diferencia entre el deseo y la necesidad, qu� significa desear un juguete y necesitar comida. Con los ni�os de segundo grado le toc� hablarle de los impuestos, ��por qu� hay que pagar impuestos?, no tard� en preguntarle alguien�. Y cuando ella contest� que gracias a los impuestos se embellece la ciudad y se limpian los parques, otro ni�o respondi� que en su vecindario no pasaba el carro de la basura. �Si no lo hacen puedes exigirlo porque est�s pagando por ello�, fue la respuesta de Lineth.

Para esta voluntaria estas dudas que van resolviendo en clases ayudan a los chicos a formarse como ciudadanos.

El que los ni�os logren asimilar estos conceptos es posible gracias a que todo el material y las gu�as se les proporciona seg�n su edad. A la vez, sus orientadores tambi�n reciben instrucciones antes de ponerse frente a un sal�n de clases.

Por qu� dar sin recibir

Escuela Sara Sotillo beneficiaria del programa Alumnos apoyando Alumnos.

Algunas veces le han preguntado c�mo hace para que personas trabajen gratis con tanta disciplina, mientras en muchas empresas las personas asalariadas lo hacen con desgano. Semejante comentario le provoca una sonrisa.

Pero en seguida adopta un tono serio. �Mucha gente se acerca a AFS o a otras instituciones solo porque quieren ayudar, son gente en busca de algo m�s que un trabajo, un buen sueldo o estatus. Gente que desea trascender a trav�s de otras personas�.

Es eso lo que, en su caso, explica que sus voluntarios salgan de su casa con el solo objetivo de ayudar a una joven extranjera que intenta adaptarse a Panam� o de aliviar los temores de un estudiante paname�o pr�ximo a vivir durante un a�o en el otro lado del mundo.

�Una persona puede ser excelente voluntaria para un lugar y no encajar en otro; lo importante es que la organizaci�n con la que est� tenga valores y una misi�n definida�.

Aunque ve c�mo en los j�venes se despierta el inter�s por ayudar a otros, Guerrel ha visto que el voluntariado es un trabajo para todas las edades. En su grupo cuenta con voluntarios de 70 y 62 a�os, que hacen su esfuerzo con una energ�a envidiable para cualquier persona joven.

�Lo m�s triste en esta vida es pasar inadvertido. El voluntario busca dejar huella, por ello va m�s all� de la mayor�a que se queja porque las cosas van mal y el mundo est� lleno de problemas; el voluntario se dice: yo voy a ser algo�.