Publicado el viernes 19 de enero de 2007 - Edici�n No. 878 | Inicio | | Foros | Favoritos | Buzón | ? |
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SALUD
Vida orgánica

Los alimentos orgánicos, producidos sin el uso de químicos u hormonas, son benéficos para el organismo, e incluirlos en la dieta diaria ayuda a prevenir enfermedades.

PATRICIA ARAMBURÚ

Obtener productos orgánicos en un supermercado local hace 10 años era algo casi imposible. Hoy día existe una sección específica para este tipo de alimentos. Azúcar orgánico, vino orgánico, comida orgánica para las mascotas e incluso papel higiénico orgánico, todo se consigue en Estados Unidos en el supermercado, donde existe un boom por seguir este estilo de vida.

La doctora Débora A. de Grimaldo, especialista en nutrición, explica que los alimentos orgánicos son aquellos que "en ninguna de sus etapas de producción utiliza fertilizantes, herbicidas o pesticidas químicos, colorantes, preservantes, hormonas, metales pesados, radiaciones, y los suelos donde se cultivan tampoco". Por lo tanto son de gran beneficio para el organismo, ya que son libres de contaminantes y químicos. Se trata de un tipo de alimentación que protege la vida del planeta y la salud de los consumidores.

El ganado orgánico también recibe especial cuidado, ya que goza del libre pastoreo. En este proceso, a los animales no se les suministra hormonas para que crezcan más rápido, sino que se les permite cumplir cierto tiempo de vida y después se les sacrifica de forma rápida para que no segreguen sustancias nocivas producto del dolor o del temor.

¿Vale la pena?

Es difícil de diferenciarlos a simple vista, ya que la mayoría luce igual que cualquier producto convencional. La manera de saber si son orgánicos es porque llevan un sello de certificación que garantiza que ese producto realmente se cultivó o fue producido siguiendo el riguroso y específico protocolo. Por esta razón resultan más costosos que los alimentos producidos por el método convencional.

"Es muy difícil realmente producir un alimento orgánico (comprobar y certificar), por todos los pasos de producción que involucra, su producción es costosa y se traduce en un costo del producto que puede ser del 30% al 100% más de su costo en producción normal", afirma Grimaldo, quien lo recomendaría a sus pacientes solamente "cuando sea una política de salud en nuestro país" y explica que existe una institución responsable de llevar al consumidor ese producto debidamente reglamentado.

Las ventajas de comer orgánico, según la doctora, son las siguientes:

a) El gran beneficio es que es un producto libre de residuos químicos.

b) Protege el ecosistema agrícola (no produce polutos ni sustancias dañinas al medio ambiente).

c) Puede incorporar al agricultor y convertirlo en guardián del paisaje y de los ecosistemas agrícolas.

Aún no existe el estudio que asegure que los alimentos orgánicos son más nutritivos que los alimentos convencionales, principalmente debido a la enorme cantidad de variables requeridas para hacer una comparación justa entre los mismos; como la variedad de cultivos, tiempo transcurrido después de la cosecha, tratamiento post-recolección, el clima y el tipo de suelo.

Estudios lo comprueban


Un estudio de la Asociación Británica de Suelo, analizó 400 estudios de investigación nutricional y llegó a la conclusión de que los alimentos orgánicos contienen más minerales y vitaminas. En tanto, una investigación estadounidense realizada por el Journal of Agricultural and Food Chemistry, concluyó que las frutas y vegetales orgánicos tuvieron niveles más altos de antioxidantes, los cuales sirven para prevenir el envejecimiento prematuro e incluso el cáncer. Aunque está comprobado que los productos orgánicos no son necesariamente bajos en calorías, por lo que quienes los ingieran debe seguir regulando su dieta.

Todos a comer orgánico

Solamente en un mundo perfecto, todos los seres humanos podríamos comer orgánico; así lo afirma Grimaldo, quien cree firmemente que nos vamos a mover en esa dirección, pero que aún falta una legislación que regule esta materia. En EU aún se está en proceso de convertirlo en ley.

Los campesinos que quieren que sus productos lleven el sello oficial orgánico no pueden usar la irradiación, barro procedente de aguas servidas ni organismos modificados genéticamente. También deben evitar los antibióticos en el ganado y utilizar alimentos orgánicos para alimentar a los animales.


 
 
 
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